Este año voy a ser como me dé la gana.
Voy a darme permiso para sentir lo que siento.
Voy a vivir sin sensación de esfuerzo.
Y voy a quitarme las etiquetas que ya no quiero.
Sí señor, este año voy a ser como me dé la gana.
Voy a ser libre para reír y para llorar.
Voy a mostrarme vulnerable de verdad.
Voy a aceptarme como soy, y no como “tendría que”.
Voy a sentir el frío si hace falta.
Y voy a dejar que entre la luz por la ventana.
Sí, este año voy a ser como me dé la gana.
Cuidaré de no hacer daño a los demás.
Pero esta vez voy a ponérmelo fácil.
Esta vez voy a decir lo que pienso.
Esta vez voy a hacer lo que quiero.
Y esta vez voy a ir por aquello en lo que creo.
Sí, este año por fin voy a ser como me dé la gana.
Seré auténtica.
Me regalaré libertad.
Encajaré en mi molde y en el de nadie más.
Y podré ser quien quiera ser, así, sencillamente, sin pensar.
Ya ves, ha llegado el momento de ser yo misma.
De cuidarme yo para poder cuidar a los demás.
De respetarme yo para poder respetar a los demás.
Y de dejar que cada uno elija lo que quiera.
Porque los demás también quieren ser como les dé la gana.
Dolerá, lo sé. Pero esta vez voy a ser yo misma.
Voy a olvidarme de las normas que yo no puse.
Ya no voy a permitir que otros decidan por mí.
Me saldré de ese rol de niña buena si hace falta.
Lo que sea con tal de ser como me dé la gana.
Tomaré mis propias decisiones aunque me equivoque.
Seré consciente de mis sombras aunque no vea nada.
Me sentiré merecedora a pesar de mis errores.
Y confiaré en mí aunque otros dejen de hacerlo.
Sí, esta vez prometo que voy a ser como me dé la gana.
Que voy a creer en mí y en mis opiniones.
Que voy a sentirme satisfecha con lo que haga.
Que voy a darme permiso para soñar, para jugar, para probar y para experimentar.
Que voy a volar, aunque a veces no sienta las alas.
Que voy a sonreír y a estar alegre, aunque no pase nada.
Y que voy a valorarme por todo ello, por ser yo misma, por ser como me dé la gana.
Ya valió de tanta pamplina.
Este año voy a priorizar lo que me haga sentir bien.
Voy a disfrutar de cada día como si fuera el último.
Voy a dejar de controlar, porque ya no lo necesito.
Ahora voy a permitir que pase lo que tenga que pasar.
Ya ves, he decidido que este año voy a ser como me dé la gana.
Que voy a ser valiente y a vivir mi vida.
Que voy a sentirme orgullosa de mis decisiones aunque no me lleven donde esperaba.
Que voy a dar manteniendo la mirada.
Que voy a recibir sintiéndome digna de ello.
Y que voy a aceptar que a veces no recibiré lo que esperaba.
Hasta aquí hemos llegado.
Esta vez voy a apostar por mí.
Voy a hacer de mi vida una aventura.
Voy a pensar qué es lo mejor para mi.
Voy a sentirme incómoda si hace falta.
Y voy a cambiar lo que no me satisfaga.
Lo haré como sepa hacerlo.
Lo haré en vez de dejar que lo hagan por mí.
Lo haré porque acepto el miedo a encontrar lo que no me quiero encontrar.
Y lo haré para ver que es más fácil y sencillo de lo que pensaba.
Recordaré que todo lo que hago tiene consecuencias.
Pero no olvidaré que lo que no hago, también las tiene.
Sí, por si no te has enterado, este año voy a ser como me dé la gana.
Me liberaré de lo que no es mío.
Seré la dueña de mis botones y mis emociones.
Diré que no a sus chantajes.
Y comprenderé que allí no hay nada para mí.
Que puedo hacer lo que quiera y como yo quiera.
Que puedo quitarme los “tengo que” y los “debería”.
Que ya no necesito “quedar bien” siempre.
Que ya no me hace falta pensar en el “qué dirán”.
Que yo elijo gustarme aunque no guste.
Y que ahora quiero valorarme igual aunque opine diferente.
Sí, ha llegado el año de ser yo misma.
Esta vez voy a quererme como nunca.
Voy a concederme la vida que me merezco.
Y te juro que voy a hacer que valga la pena.
Porque esta vez, por fin, voy a ser como me dé la gana.
Y tú, ¿cómo quieres a SER este año? Puedes compartirlo conmigo en los comentarios aquí debajo ;-).
Hola mi nombre es Raysa
Quiero darle las gracias por que me han ayudado bastante y tengo mi autoestima bien recuperada. Ahora soy otra persona, gracias por sus bellos consejos y animación. Muchas bendiciones.
Qué bien, Raysa. Me alegro muchísimo por ti, disfrútalo y sigue así.
Un abrazo grande,
Vanessa
¡¡¡Me ha encantado!!! Muchas gracias, qué manera de escribir y qué dificil hacer que llegue… un 10.
Muchas gracias, Sonia. Me alegro mucho de que te haya llegado.
Un abrazo grande,
Vanessa
Vanessa, gracias 🙂 Me encanto lo de ser como te da la gana, me identifica totalmente…y voy a poner en práctica
Un abrazo
Estupendo, Gabriela. Justamente este post era para que, quien lo necesitara, encontrara la inspiración para ser más como le diera la gana… A por ello ;-). Muy feliz 2017.
Besos y sonrisas,
Vanessa
Este escrito será parte de mi, y lo tendré bien a la mano para releerlo cuando tenga que recordar que y quién quiero ser.
Muchas gracias por compartir tanto de ti 🙂
Bendiciones
Tenlo tan a mano como lo necesites, Carolina. Lo que sea si te sirve para ser quien tú quieras y como tú quieras… :-).
Un fuerte abrazo,
Vanessa
Muchas gracias, Vanessa. Que este año que entra se cumpla todo eso. Gracias por ayudarme tanto, te deseo lo mejor en este año.
Gracias a ti Mari Carmen, por estar ahí siempre, aportando y agradeciendo desde el corazón… Yo también te deseo lo mejor este año y siempre, que el 2017 te regale mucha salud, mucha alegría y mucho amor.
Un cariñoso abrazo,
Vanessa
Este post es una maravilla y tienes tooooda la razón;muchas gracias por compartirlo. Lo tendré siempre conmigo porque ahora es cuando más lo necesito…GRACIAS???
Qué bien que te haya gustado, Alba. Muchas gracias por comentarlo. Tenlo contigo tan cerca como necesites para ser quien quieras ser este 2017.
Un abrazo grande y GRACIAS a ti también. Te deseo un muy feliz y alegre 2017.
Vanessa
Muchas gracias por el artículo, Vanessa.
¡¡¡Tienes tanta razón!!! Aunque desgraciadamente no siempre es posible ni conveniente ser, hacer, decir… lo que nos dé la gana, lo que puede llegar a ser, en ocasiones, muy frustrante. Me pregunto cómo lidiar con ese tipo de sentimientos.
Por ejemplo, yo hace seis meses decidí cambiar de trabajo porque el ambiente en mi anterior empleo era “tóxico” y estaba afectando a mi salud. Se me pasó por la cabeza marcharme “dando un portazo” y diciendo “ahí os quedáis que yo me largo”, pero no lo hice así. Al contrario de lo que me pedía el cuerpo, decídí despedirme de mis empleadores de forma educada, dándoles las gracias por todo y deseándoles lo mejor para el futuro.
Creo que actué de la forma más conveniente para mi porque el mundo laboral es un pañuelo y nunca sabes con quien te cruzarás en el futuro. No obstante, debo reconocer que reprimirme me afectó negativamente durante algún tiempo. A veces, todavía recuerdo algunos pasajes desagradables que me tocó vivir y me hubiera gustado soltar “cuatro verdades” el día de mi despedida.
Saludos 🙂
Muchas gracias, Alfredo. Tu aportación es muy interesante. El cierto que a veces no conviene decir lo que te dé la gana. Pero creo que lo importante es ser consciente de que, incluso en esos momentos, eres tú quien está eligiendo cómo eres. Por educación, porque te conviene, porque no merece la pena o por lo que sea, tú eres el que eliges. En mi opinión esa es la clave. Y mi más sincera enhorabuena porque creo que has sido fiel a ti mismo con tu comportamiento. El tiempo lo pone todo en su sitio y tal vez en otro momento tengas la oportunidad de decir lo que no has dicho sin perjudicarte a ti mismo por ello.
Un abrazo,
Vanessa
Muchas gracias por responder Vanessa 🙂
¡Estupendo!. Yo también me apunto a “ser cómo me dé la gana”.
Me alegro mucho, bienvenido o bienvenida :-).
Un abrazo,
Vanessa
Qué maravilloso texto.
Aplica a cada sentir mío.
Agradecida por encontrármelo en este momento, sincronicidades, diría Jung.
Muchas gracias por compartir e inspirar.
Abrazo de luz
Qué bien, Sol. Fueron mis reflexiones de un año nuevo, me alegro de que aún inspire y te sirva.
Un abrazo,
Vanessa