A ver, que levante la mano el que nunca haya tenido un conflicto con alguien. Nadie, ¿verdad? Es que es imposible. Todos tenemos conflictos en nuestras relaciones personales. Pequeñas o grandes discusiones con tu pareja, un amigo, tus padres, tus hijos, un compañero de trabajo… Con todos ellos surgen problemas, roces y malentendidos y es algo completamente normal. Lo que tal vez ya no lo sea es cómo a veces reaccionamos ante ellos. Cómo, por miedo al conflicto en sí o por no saber cómo solucionarlo, nos complicamos la vida y hacemos que el problema se magnifique.
Por eso lo primero para poder resolver un conflicto con alguien es tener claro que:
- Tú ves las cosas desde tu punto de vista. Desde ese tienes toda la razón, pero es que la otra persona las está viendo desde el suyo. Y ninguno es mejor ni peor. Son diferentes porque somos personas diferentes, cada una con sus valores, sus creencias, sus experiencias y sus aprendizajes. Y muchas veces lo que nos cuesta es ponernos en el lugar del otro y ver las cosas como él o ella las está viendo. ¿O a ti alguna vez te ha venido alguien contando una movida que ha tenido con otra persona y diciéndote que la razón la tenía el otro? Nol, a mí tampoco. Uno siempre cree que tiene la razón.
- Tú y solo tú eres el responsable de tus actos y de tus sentimientos. No puedes hacer responsable al otro de cómo te has sentido. Por eso, en vez de decir “cuando haces eso me sacas de quicio” o “consigues que me ponga triste”, lo correcto sería decir “me pongo muy nerviosa” o “me siento triste cuando haces eso”. Siempre usando la primera persona del singular, porque solo uno mismo es responsable de lo que dice, de lo que hace y de lo que siente. Es algo que se ve muy claro cuando, ante la misma situación, dos personas actúan de forma diferente. Tal vez una elija enfadarse y marcharse y la otra se llene de rabia y empiece a gritar. Lo importante es que cada una de ellas es responsable del camino que escoge.
- Hay que saber encontrar el momento. Si tienes que esperar a recuperar la calma en vez de soltarlo todo envuelto en un manto de rabia y enfado, pues esperas. Deja que se calmen las aguas para no decir cosas que en realidad no sientes y de las que seguramente después te arrepientas. ¿Que cuánto tiempo esperar? El suficiente para que ya nadie esté tenso y no demasiado como para que el asunto se haya enquistado por no haberlo solucionado antes.
- Comunicas con tus palabras, pero también, y mucho más, con tu lenguaje no verbal: tus gestos, tus movimientos, tu postura, tu actitud, el tono de tu voz, el volumen… De nada sirve que con tus palabras estés diciendo “no quiero discutir” si todo lo demás en ti dice justo lo contrario.
- La clave está en respetar al otro: su manera de ser, de sentir, de ver las cosas, de comportarse, su ritmo, el tiempo que necesite… Darte cuenta de que la otra persona es diferente y que tiene derecho a darle importancia a algo a lo que tú no se la das. O al revés.
- La mayoría de las veces hay algo que no estamos viendo y que es lo que ha ocasionado el conflicto.Por ejemplo que a la otra persona le faltaba información de lo que nos apetecía o lo que esperábamos de ella… Y nadie es adivino. Que alguien te quiera no significa que tenga que saber que te apetece mucho ese plan juntos o que lo que tú querías era que estuviérais solos… Y que no lo adivine no significa que no te quiera o no te valore. Simplemente es que la otra persona no puede saber todo eso que sentimos o queremos si no se lo decimos. Por eso es tan importante que te preguntes, ¿qué es lo que no estoy viendo en esta situación?
- No hay que guardarse las cosas, ni por vergüenza, ni por miedo, ni por qué pensará el otro, ni por no hacerle daño, ni por nada. Expresa lo que sientes, lo que te gustó, lo que te molestó, lo que te habría gustado… Esa persona te va a valorar más si eres sincera. De verdad, la mejor manera de conectar con alguien es decirle lo que sientes. Así que si lo que te cuesta es el cómo decírselo, trabaja para mejorar eso, pero no te calles por no saber cómo hacerlo.
- Necesitas escuchar tus emociones… Preguntarte qué es lo que estas sintiendo en ese momento. ¿Rabia? ¿Tristeza? ¿Decepción? Y preguntarle al otro como se ha sentido. Puedes intentar imaginarlo si eres capaz de ponerte en su lugar, pero lo mejor de todo, lo que nunca falla, es que se lo preguntes.
- La maestría en las relaciones personales está en saber aceptar las críticas. No te las tomes como algo personal, sino como una posible área de mejora sobre la que reflexionar. Habla sobre ello tranquilamente, sin enfadarte y sin ponerte a la defensiva. Sin “ya, pero es que tú” o “mira quien fue a hablar”.
- La culpa no es de nadie. Por favor, si quieres resolver un conflicto no te centres en la culpa. De verdad, ¿cómo vas a dormir mejor? ¿Si dejas claro que tú no tienes la culpa o si solucionas el conflicto?
Y, llevando todo esto a la práctica, aquí van unos pasos imprescindibles para el momento de resolver el conflicto:
- Decirle a la persona cómo te has sentido (haciéndote responsable tú, recuerda) cuando…
- Decirle lo que te gustaría que hiciera diferente la próxima vez. Siempre desde la sugerencia, no desde el reproche ni la exigencia.
Por ejemplo, “me he sentido triste cuando no me has invitado a ir contigo a la cena. La próxima vez me gustaría que me llamaras y me preguntaras si me apetece acompañarte”.
Y en cambio no estaría tan bien decir “Estoy triste porque has ido a la cena y no has contado conmigo”. Primero porque la persona que dice eso está echando la culpa de su tristeza al otro, no se está responsabilizando. Y segundo porque el “no has contado conmigo” es un juicio, una opinión de quien lo dice, no un hecho objetivo. Si dices algo así para solucionar un conflicto, mal empezamos… 😉 .
- Y dile también algo que te gustó y no solo no una retahíla de cosas que te molestaron.
- Demuéstrale a la persona que comprendes cómo se ha podido sentir. Por ejemplo diciendo “entiendo que te sintieras así” o “comprendo que pensaras que no me interesaba por ti”. Y nada de “peros” ni frases tipo “no es mi culpa” o “ya te lo dije”.
- No etiquetes ni utilices el verbo ser. Aquí nadie es, solo se comporta de una determinada manera. El que dice una mentira no es un mentiroso, solo ha dicho una mentira. ¿Qué tal decirle “en mi opinión tu comportamiento no fue del todo sincero”?. Y sobre todo recuerda y recalca siempre que es tu opinión.
- Pide perdón, porque tal vez no te arrepientas de lo que hiciste o dijiste, pero si eso hizo daño a la otra persona no cuesta nada pedir perdón y demostrarle que no querías hacerle daño. Si le decimos a una persona que nos gustaría haber hecho eso de una forma diferente y que a partir de ahora vamos a hacer un esfuerzo para cambiarlo, abrimos el campo para que esa persona también se sincere, reflexione sobre lo que podría haber hecho diferente y nos muestre su interés por arreglarlo. ¿Y qué más da quien sea el primero en pedir perdón? Eso también es ser generoso.
- Y cuando lo solucionéis, ya está. Tema zanjado. No vale volver a sacarlo una y otra vez.
¿Qué me dices? Si te ha gustado el post y quieres seguir mejorando tus relaciones personales solo tienes que dejarme tu email aquí debajo.
HOLA VANESSA. SOY ELENA. ME PASA QUE HE TENIDO UN CONFLICTO CON MI ESPOSO DESDE YA HACE VARIOS AÑOS. PORQUE DICE QUE YO NO LE INFORME QUE AYUDARÍA ECONOMICAMENTE A MI PADRE Y POR LAS RELACIONES SEXUALES YA QUE YO ENTRE EN MENOPAUSIA Y NO ME ENTENDIA. DESPUES CONTINUAMOS COMO HERMANOS PORQUE EL DECIDIO YA NO ACERCARSE A MI. YO LO INTENTE PERO QUIZA NO DE LA FORMA ADECUADA. TAMBIEN EL CADA VEZ QUE SACABA A FLOTE EL PROBLEMA, TRATANDO DE SOLUCIONARLO O RETOMANDO LA RELACION DESDE CERO O SEPARANDONOS PARA QUE CADA QUIEN TUVIERA SU ESPACIO PARA HACER LO QUE MAS LE GUSTE. SOLO DECIA QUE SE IRIA DE LA CASA PARA DEJARME CON MI FAMILIA LA CUAL NUNCA ESTA CONMIGO. PERO ASI PASARON MUCHOS AÑOS Y ME ACABO DE ENTERAR DE QUE ESTA TENIENDO UNA RELACIÓN CON ALGUIEN.
AL CONFRONTARLO ME DIJO QUE SI PORQUE YA LO HABIAN VISTO. LE PREGUNTE QUE CUAL ERA SU PROPUESTA PARA SANAR ESTA SITUACION. ME CONTESTO QUE IRSE DE LA CASA. YO LE PREGUNTE QUE CUANDO Y EL CONTESTO ADEMAS DE MUCHAS OTRAS MAJADERIAS QUE EN UNOS 10 0 15 AÑOS.
ESO ME ENOJO Y LE PEDI QUE LO HICIERA A LA BREVEDAD YA QUE ERA UNA SITUACION INCOMODA SEGUIR ASI. QUISE ACORDAR CON EL EN TENER YA SEPARACIONES DESDE DENTRO, CADA QUIEN LO SUYO. NO LO ACEPTO PERO YO ME MANTUVE FIRME.
YA DORMIMOS EN HABITACIONES SEPARADAS, SEGUIMOS COMPARTIENDO LOS GASTOS PERO YO YA NO ESTOY CUANDO EL DESE COMER O ALGO, EL DEBE BUSCARSE.
LO HA ACPETADO A REGAÑADIENTES. PERO TAMPOCO OFRECE NINGUN CAMBIO. DESEA SEGUIR TENIENDO SU VIDA DE SOLTERO CON AMIGAS Y AMIGOS.
ME COSTO MUCHO PONER LIMITES PERO AHORA YA ESTAN. SE QUE DEBO ESPERAR, SIN EXPECTATIVAS, QUE COSAS BUENAS PARA AMBOS VENGAN A TRAVES DE ESTOS LIMITES.
MUCHAS GRACIAS, OJALA Y ME PUEDAS ORIENTAR QUE DEBO TRABAJAR EN MI PARA MANTENERME FIRME Y NO VOLVER A PERMITIR QUE ME UTILICEN COMO SI NO TUVIERA NINGUN VALOR.
GRACIAS
ELENA.
Elena,
Enhorabuena por los pasos tan importantes que estás dando… ¿Qué es lo que te ha dado fuerzas para empezar a hacerlo? ¿Cuál ha sido tu “para qué”? Es importante que tengas eso claro para que te dé fuerzas en los momentos de dudas. También que visualices a la Elena que se valora y se cuida, que veas a lo que te estás acercando con estas decisiones que estás tomando… Y, sobre todo, que confíes en que todo irá bien si lo estás haciendo desde el amor a ti misma y a la Elena que quieres ser.
Un abrazo cariñoso,
Vanessa
Hola Vanesa :
Estoy leyendo tus posts y me parecen muy interesantes. Compruebo que necesito aumentar mi autoestima. Estoy pasando un periodo triste por estar sufriendo de forma injusta la crítica y el despreció de unas primas a las que yo siempre consideré como hermanas.
Siempre me he portado muy bien con ellas, pero en un momento dado se torció la relación porque se metieron en un problema surgido entre mi hermano y yo .
Estoy sufriendo mucho. Las he perdido totalmente, apenas nos hablamos y he perdido la relación con mi hermano.
Somos de un pueblo muy pequeño donde vamos en vacaciones y allí estoy sufriendo el ninguneo de mucha gente a los que ellas han arrastrado contra mí. Me han apartado de mis amigas de la infancia y han conseguido que me quede sola. Ya no tengo ilusión por ir, pero no soy capaz de superar esto.
Estoy sufriendo mucho, he tenido 3 nietos y nadie me ha dado la enhorabuena ni ha querido conocerlos. La prima que empezó todo me mando un whatsapp totalmente insultante, incluso hablándome mal de mí madre que ya ha muerto.
Ya no puedo más con este despreció, tengo la moral hundida y estoy en puertas de entrar en quirófano para una importante operación, pero mi moral está por los suelos.
Necesito ayuda. Después de tres años no soy capaz de superarlo y tengo mucha tristeza.
Te doy las gracias anticipadas y espero tu ayuda. Gracias.
Carmen,
Creo que para avanzar lo primero que necesitas es saber qué quieres… ¿Quieres perdonar, aunque no te hables con ellas y las cosas entre vosotras sigan igual? ¿Quieres olvidar y seguir haciendo tu vida aceptando que esas relaciones se han roto y las consecuencias de ello? ¿Quieres hacer las paces con ellas?
Siempre que hay una pérdida ha de haber un duelo. Quiero decir que no es necesario que se muera nadie para que haya que hacer un duelo, cualquier pérdida conlleva un duelo y eso implica tristeza y dolor.
Incluso podrías hablar con tus amigas, aunque no quieras hacerlo con tus primas, y esforzarte por recuperarlas desde la honestidad y el cariño, diciéndoles que son importantes para ti :-).
Un abrazo grande,
Vanessa
Hola Vanesa ,gracias por contestarme. Yo creo que he perdonado. De hecho no dejo de saludarlas. Si me entero de que están malas pregunto, incluso a mis primas. He tratado de que todo vuelva a la normalidad incluso invitando a mi casa, pero no han querido entrar. Ya no sé qué más puedo hacer, creo que incluso me he bajado demasiado sin conseguir nada.
La realidad es que han pasado 3 años sin parar de hablar mal de mí, alguna verdad y mucha mentira, y han conseguido su objetivo. He perdido a mi hermano porque su mujer se ha metido en el círculo de ese chismorreo y a mí me han dado de lado totalmente.
Te sorprenderá pero yo soy una farmaceutica con amigos y vida social aquí en mi ciudad pero no puedo superar el despreció injusto de mi gente de la infancia y de mi familia. Por eso creo q el problema es mi autoestima y necesito ayuda.
Gracias
Hola Vanessa! Es un post que me viene muy bien en estos momentos y quería agradecerte. Actualmente hay un conflicto abierto con mi hermana, con la que no me hablo desde hace 3 meses. Yo decidí salirme de una relación que se había convertido en tóxica, pero sufro mucho pensando todo el día en el tema.
Ella me provoca quedando en mi cara con el círculo de amigos que teníamos en común, los cuales se han posicionado con ella porque eran sus amigos. Me pregunto qué opciones tengo y no veo salida.
La pregunta es qué hacer si percibes que el otro no se esfuerza lo más mínimo en arreglarlo, es más, parece que le da lo mismo. Creo que sabe de mi dependencia emocional y abusa de ello como para que yo me doblegue.
Me planteo en escribir un mail pero me juego el cuello en que no contestara o me despreciará diciendo que no tiene nada qué decirme.
¿Cómo seguir adelante con un panorama tan triste ?
Hola María Pilar,
Te diría que lo primero es que trabajes esa dependencia emocional y esa necesidad de aprobación, para que tu interior esté “lo más limpio posible” de esas creencias limitantes y de todo lo que no es tuyo. Sin eso seguirás actuando por el otro más que por ti misma, incluso cuando dentro de ti sientas que no recibes lo que mereces o que el otro no cuida de la relación al mismo nivel que tú.
Y, mientras llegas a eso, respecto a lo de escribirle, que hagas eso con lo que tú te vayas a quedar más tranquila. Que lo que decidas no sea por ella o por arreglar la situación, sino simplemente para quedarte a gusto.
Un abrazo,
Vanessa