Descárgate GRATIS la guía Cómo Defenderte cuando Alguien Traspasa tus Límites

Las personas perfeccionistas son incapaces de esto

Mujer en la piscina - personas perfeccionistas

¿Sabes una cosa que las personas perfeccionistas no se permiten?

Hacer algo normal. Regular. Medio bien.

Hacerlo por el simple hecho de hacerlo, incluso simplemente por disfrutarlo, sin necesidad de hacerlo perfecto.

Yo antes no me daba cuenta de esto (es lo que tiene ser perfeccionista a saco, que cuando lo eres no lo sabes).

Te crees que lo normal es hacer las cosas así, exigiéndote siempre el máximo y con la sensación (muchas veces inconsciente) de que nunca es suficiente.

Pero ahora, que por fin he aprendido a hacer las cosas disfrutándolas, ya sí que soy capaz de reconocer si me sale mi ramalazo perfeccionista. Y, también, de olerlo a leguas en alguien.

Bueno, pues donde voy a nadar hay un socorrista que siempre me dice “levanta así los brazos”, “da la patada así”, “el giro cuando llegues al final hazlo así”…

Y yo no voy a nadar para perfeccionar mi técnica. Voy porque me sienta de maravilla y es de mis mejores ratos del día.

¿Que lo podría hacer mejor? Uy sí, ¡mucho mejor! Pero, ¿lo necesito? No, no lo necesito.

Con no ahogarme ni hacerme daño me vale. Y tal y como nado, ya cumple su función, que es disfrutar de algo que, además, me relaja y es bueno para mi espalda.

Total, que a mi socorrista, que es un encanto, en eso no le hago ni caso.

Bueno, pues esto una persona perfeccionista no lo puede consentir. No puede hacer algo si no es para hacerlo perfecto. Pero claro, para alguien así, naaada es nunca lo suficientemente perfecto.

Curioso, ¿verdad? Porque para mí, que gracias a dios ya no soy perfeccionista, yo ya nado perfecto. Perfecto para mí, y punto.

En cambio, para alguien perfeccionista el hacerlo perfecto es una quimera inalcanzable que siempre se le escapa de las manos…

Algo a lo que nunca llega y que le mete en un bucle de culpa e insatisfacción.

Y el problema es que, a una persona perfeccionista, esto le pasa con todo. Da igual que sea para hacer un bizcocho que para nadar o para hacer un informe del trabajo.

Cuando la gracia (y lo sano) está, precisamente, en saber discernir en qué quieres poner toda tu energía para obtener el mejor resultado posible y en qué quieres simplemente disfrutar, pasarlo bien o relajarte.

El problema es que, quien tiene el perfeccionismo tan metido en vena, se lo lleva consigo a todas partes.

¿Te suena esto de exigirte siempre más y más y no quedarte nunca satisfecha con lo que haces o con cómo eres?

Pues aquí tienes un curso maravilloso para que te liberes de la autocritica y de la culpa y aprendas a quererte, a disfrutar y a sentirte segura y a gusto contigo misma (lo hagas como lo hagas).

¿Quieres más consejos?

Apúntate GRATIS y recibe cada semana herramientas y recursos para tener Más Seguridad, Más Felicidad y Más Bienestar.

Sí, acepto la Política de protección de datos.

Acerca de Vanessa Carreño

Trabajo con mujeres que se sienten inseguras, no se valoran ni tienen confianza en sí mismas, le dan muchas vueltas a la cabeza y se preocupan mucho por lo que piensen los demás.

Con mis programas de Autoestima, Relaciones Personales y Dependencia Emocional consiguen ganar confianza en sí mismas y sentirse seguras y capaces de alcanzar sus objetivos. Aprenden a valorarse, se atreven a ser ellas mismas y empiezan a disfrutar de su vida y de sus relaciones.

¿Quieres que te ayude a ti también? Solicita una sesión de valoración gratuita conmigo rellenando este formulario.

2 comentarios

2 comentarios
  1. Maria Laura 12/09/2024

    Sufrí mucho en mi vida, fue un dolor muy grande del que no puedo salir. Quisieron acabar con mi vida pero acá estoy, sin saber toda la verdad es muy duro. No creo que alguien me pueda ayudar.

    Responder
    • Vanessa Carreño Andrés 24/09/2024

      Vaya, Maria Laura, siento que lo vivas así y que pienses que nadie te puede ayudar. Creo profundamente en el cambio y en que todos podemos estar mejor, pero lo primero para eso es que aprendas a ayudarte a ti misma y a darte esa oportunidad de pedir ayuda.
      Un abrazo grande,
      Vanessa

      Responder

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicado. Los campos obligatorios están marcados como *



Vanessa Coaching to Be

Únete a los más de 20.000 suscriptores, ¡con regalo incluido!

Apúntate GRATIS y te enviaré ahora mismo el audio "Cómo Evitar que Alguien Te Haga Sentir Mal".

Sí, acepto la Política de protección de datos.

No te enviaré nada de spam y puedes darte de baja cuando te apetezca

Los post más leídos

¿Quieres trabajar conmigo?

Rellena este formulario para tener una sesión de valoración gratuita”.

Buscar

¡Hey!

no te vayas sin tu regalo

¿Quieres empezar a confiar en ti, sentirte segura y disfrutar de tu vida y de tus relaciones?
Apúntate gratis y llévate el audio “Cómo Evitar que Alguien Te Haga Sentir Mal" de regalo.

Sí, acepto la Política de protección de datos.

NO TE ENVIARÉ NADA DE SPAM Y PUEDES DARTE DE BAJA CUANDO TE APETEZCA.

Sí, acepto la Política de protección de datos.

NO TE ENVIARÉ NADA DE SPAM Y PUEDES DARTE DE BAJA CUANDO TE APETEZCA

Sí, acepto la Política de protección de datos.

NO TE ENVIARÉ NADA DE SPAM Y PUEDES DARTE DE BAJA CUANDO TE APETEZCA

Sí, acepto la Política de protección de datos.

NO TE ENVIARÉ NADA DE SPAM Y PUEDES DARTE DE BAJA CUANDO TE APETEZCA